“Me han llamado poeta, pero no lo soy. Yo hago canciones, tampoco soy músico. Me enseñó a tocar la guitarra mi amigo de la infancia, Txus, y el resto lo he aprendido de oído. No sé solfeo, soy autodidacta en esto de la música.”
Fito Cabrales (Fito & Fitipaldis)
Como Realizarse Como Músico Sin Tener Certificado
Si sientes que la música es a lo que quieres dedicarte, pero vives y te relacionas con el entorno que quiere convencerte de lo contrario sólo porque no tienes o no estés certificado, lee este artículo.
1. Hay muchas profesiones, no sólo la de la música donde el certificado o diploma no juegan el papel tan importante cómo en la profesión de un médico o de un abogado.
E incluso si eres un abogado y tienes diploma, no significa que vas a ser un buen profesional. Pues, eso depende de cómo tú estás preparado personalmente, del desarrollo de nivel de tus habilidades personales que no están evaluados en el documento.
¿Necesitaba Mozart un diploma para ser compositor?
¿Le preguntaban a Bethovhen el certificado antes de escuchar su música?
¿Qué estudios y preparación profesional han tenido Madona, Bon Jovi, Dave Grohl? ¿Si supieras que uno de ellos no ha tenido certificado, no le escucharías, no irías a su concierto?
Y es que no existe un diploma que puede cualificar tu nivel de creatividad, tu capacidad de ver y sentir lo que los demás no pueden o con qué frecuencia tienes las ideas e inspiración.
Tampoco existe un certificado que te permitiera componer o escribir si tú realmente no sientes capacitado para esto.
Lo que te define cómo profesional no es el documento sino el valor que tienen tus creaciones y tu trabajo…
2. Todos vivimos dentro de un entorno y estamos rodeados de personas que no tienen por qué estar de acuerdo con las decisiones que tomemos.
Si vas a estar continuamente buscando la aprobación y el permiso de tu entorno: padres, hermanos, tíos, amigos, etc., es probable que vas a vivir su vida y no la tuya. Y es que no tienes por qué tener el permiso de alguien para hacer lo quieres y lo que deseas.
Tus padres tienen su punto de vista que han adquirido según sus experiencias y su nivel de entendimiento. Tú tienes tu punto de vista, ves la vida a tu manera, tienes tus propias experiencias y si vas a intentar a seguir sus consejos, aunque sabes que no son mejores para ti, te espera una frustración de por vida. Pasarán unos años y “mis padres no me dejaron” puede convertirse en la sensación de que al final no has podido realizarte por su culpa.
Si no te atreviste antes de tomar tu propia decisión a pesar a de que ellos no estén de acuerdo, es posible que luego tendrás conflictos más graves pero ya no estarás motivado ni ilusionado igual que ahora. Por tu bien y por el bien de ellos, crece, madura y aprende a tomar tus propias decisiones.
Tu vida sólo te pertenece a ti y tú decides cómo quieres vivirla y dedicarla: si quieres pasar la vida escuchando los consejos o quieres hacer y crear sin importar la opinión de los demás.
3. Fórmate y especialízate
En vez de escuchar los consejos y las opiniones de las personas que te rodean, ocúpate de tu formación. Tienes diploma o no, tienes que seguir mejorándote en tu vocación. Hay muchísima información en internet donde puedes aprender nuevas cosas totalmente gratis. Encuentra profesor que te es cercano a ti en tu entendimiento de la música y coge clases.
No por conseguir el diploma sino porque todos necesitamos a alguien quien nos enseñe lo que nosotros todavía no sabemos.
Busca personas que comparten tus intereses y tu punto de vista, busca contactos que pueden darte el apoyo. Muchas veces por estar relacionándonos con las personas que tienen un punto de vista negativo, nos afecta muchísimo porque todos somos humanos. Así aparecen dudas, temores, inseguridades, desconfianza. Y cualquier emoción negativa está creando la resistencia. La resistencia a tomar la decisión a salir de la zona del confort, la resistencia a buscar soluciones y seguir quejándose.
Déjalo todo esto, ocúpate de tu vida. Si ves que alguien no te apoya y sólo lo que hace es provocar en ti dudas y desconfianza, aléjate de él y busca personas que si te entienden y quieren lo mismo que tú.
Que es lo que tienes que hacer con tu vida sólo lo sabes tú. No tus padres, ni tus amigos, ni tu jefe…
Piénsatelo sobre estas tres cosas y cómo dice Yeudá Berg, un sabio, “¡No creas una sola palabra de lo que leas! ¡Comprueba las lecciones aprendidas!”
