El sábado 22 de septiembre se desarrolló el acto previsto por la Asociación socio cultural Ajey Rock, en el local de la isleta. En representación del editor, escritor y gran investigador D. Francisco Osorio Acevedo, nos acompañó su hijo Teno, que autorizado por él, firmó en su nombre la aceptación de Socio de Honor. Nombramiento, dicho sea, más que merecido por toda la inmensa labor cultural, desarrollada a lo largo de su vida y que sigue generando actualmente. Pero, sobre todo, por dar a conocer todo pedacito escondido de la historia de Canarias. Invirtiendo a la investigación, casi todo el tiempo disponible, viajando y margullando entre manuscritos antiguos, a cualquier punto del mundo, en especial donde aparece alguna pista de las huellas de nuestro pasado. Horas y más horas para descubrir cualquier pasaje histórico de Canarias, entre pilas de manuscritos polvorientos, muchas veces carcomidos y a punto de desaparecer.
La intervención de Felipe Ros que participó en la mesa, viene a resumir más o menos lo anteriormente escrito, añadiendo la importancia de la humanidad de Francisco Osorio, aclarando sobre él, que nunca ha perdido el cariño de los que le rodean, ya que siempre ha sido una persona cercana, de confianza y solidaria, colaborando junto al pueblo con las causas más nobles.
Teno Osorio participó con arrolladora simpatía, aportando datos sobre el lado más humano de su padre. Contó algunas anécdotas de su infancia, y su especial relación con él, al que consideró un gran educador, cercano y de grandes valores. Agradeciendo a la asociación, que fuera en vida de su padre, el que se le reconociera su obra y su labor por la cultura y su tortuosa recuperación.
Después de la firma protocolaria y de aceptación como socio, se le entregó un gánigo como hacían los de antes, al estilo de Panchito el de la Atalaya, por el artesano y miembro de la directiva de Ajey Rock, Sergio Ojeda y también se le obsequió con un cartel de esta cita cultural, bellamente enmarcado, para el recuerdo.
Un servidor centró la disertación en la influencia de la obra de Osorio Acevedo y su importancia actualmente. Incluso reconocí que fui una de esas semillas que regadas con sus libros descubrí nuevas informaciones que eran totalmente desconocidas hasta que leí parte de su obra.
La exposición fue un éxito, en la que destacó también su obra teatral. Quiero dejar constancia, además, que al leer una de sus obras editadas dentro de la “Biblioteca Pérdida”, concretamente los manuscritos de Antonio Sedeño y Pedro Gómez Escudero, pude conocer que ese mismo libro editado en 1936, fue perseguido, buscado y destruido por los fascistas de Franco, por lo que posiblemente, al quedar sólo unos pocos ejemplares salvados de la quema, fue un lujo ver un ejemplar vivo en esas vitrinas de la asociación de Ajey Rock.
Gracias a los ponentes y asistentes por su colaboración y empuje, por promover nuestra cultura y defenderla. Para poder defender nuestra tierra, como así lo hace nuestro querido D. Francisco Osorio Acevedo, hay que conocer nuestra historia. Promoviendo y conociendo nuestra cultura, conseguiremos amarla. Y amándola, conseguiremos volver al punto de partida, defendiendo nuestra tierra contra cualquier tipo de agresión.
Pedro J. Brissón – miembro de la Asociación Ajey Rock
24-09-2018
