La exposición, que se inaugura el día 17 de diciembre, a las 20.00 horas, en la Casa de la Cultura, reúne sus series tituladas ‘El arte de comer’ y ‘Geometrías’

Rocío Arévalo

Rocío Arévalo / Foto Nacho González

El próximo día 17 de diciembre, a las 20.00 horas, será inaugurada en la Casa de la Cultura de Santa María de Guía (calle Canónigo Gordillo, 22) la exposición que reúne las series ‘El arte de comer’, de Rocío Arévalo, y ‘Geometrías’, de Marta Vega. La muestra, programada  en el marco del Circuito Insular de Artes Plásticas ‘Gran Canaria en Vivo’, impulsado por el Cabildo, a través de la Consejería de Cultura, que dirige Carlos Ruiz, permanecerá abierta hasta el 8 de enero próximo.

‘El arte de comer’, de la creadora chileno-canaria Rocío Arévalo, reúne acuarelas realizadas sobre papel por Arévalo entre los años 2012 y 2013. Alguna de sus obras pudieron verse en 2013 en la Sala San Antonio Abad, espacio dependiente del Centro Atlántico de Arte Moderno (CAAM). Arévalo prueba su oficio como acuarelista creando una especie de crónica de las relaciones sociales que mantuvo a lo largo del año 2012, cuando retrató a personas del mundo del arte (galeristas, artistas, críticos, comisarios…) en situaciones sociales en las que compartió mesa con ellas.

Por su parte, la grancanaria Marta Vega presenta una serie de obras realizadas con distintas técnicas en soportes de diversas medidas y que van del papel a la madera. El discurso plástico de Vega está afianzado sobre la línea y el color, dos elementos que son una constante en esta serie que contiene obras fechadas entre los años 2003 y 2012.

La mencionada exposición, en la que colabora la Concejalía de Cultura del citado municipio, puede visitarse en la Casa de la Cultura de Santa María de Guía,  de lunes a viernes, de 17.00 a 20.00 horas, y los sábados, de 18.00 a 20.00 horas.

Arévalo exhibe retratos de pose inesperada que hacen alusión a las dinámicas informales en las que se negocia en el ámbito del arte contemporáneo. A su vez, todos ellos tienen en común el haber sido atrapados en el gesto cultural del comer. Un gesto vital, también erógeno, que paradójicamente reproducimos para morder y tragar, escupir y vomitar, o, por el contrario, para hablar y narrar.

La muestra se articula como una pequeña parte del gran proyecto denominado por Rocío Arévalo ‘Sinestesias’ (la exposición más global dentro de su trayectoria artística). Comisariada por Suset Sánchez, giraba en torno a la comida como metáfora de las relaciones sociales y humanas, en las que entran en juego factores culturales, identidades nacionales o cuestiones de género.

En la pintura de Arévalo se manifiesta el singular inventario de las preocupaciones fundamentales que han venido constituyendo la poética de la joven chileno-canaria: la autoconciencia del yo y la identidad individual a partir de la frontera física del cuerpo; las marcas psicológicas, sociales y personales, resultado de los trastornos de la conducta alimentaria, las construcciones biopolíticas del sujeto, los afectos que intervienen en el sentido de pertenencia a una determinada comunidad y las distancias y percepciones  objetivas y subjetivas  que median en esas relaciones sociales, los materiales simbólicos de una memoria atravesada por el desplazamiento, la emigración y una infancia nómada marcada por las derivas geográficas transcontinentales y sensoriales de la contracultura hippie a finales de los años 70.

Marta Vega

Marta Vega / Foto de Nacho Oramas

Con respecto a la línea de trabajo de Marta Vega, la propia artista confiesa que utiliza un repertorio limitado de motivos, franjas verticales y horizontales de longitudes y anchuras variables. “Trabajo con un sistema  cuadriculado de bandas gruesas y delgadas que se interseccionan convirtiéndose a su vez habitáculos cuadrados y rectangulares que van tejiendo el territorio asemejándose a un paisaje urbano. Utilizo gamas de colores en las obras. Todas las piezas del cuadro tienen que ser armónicas formando a su vez un nexo de unión entre ellas”, señala la artista.

Marta Vega (1962) ha colaborado en numerosas revistas con obras originales e ilustraciones para libros. Ha realizado obras públicas de gran formato como la que se encuentra ubicada en la recepción del periódico La Provincia, en el Auditorio de Valleseco o en el centro de Medio Ambiente de El Pambaso. Últimamente trabaja con obras tridimensionales y realiza diseño de joyas. Ha participado en numerosas exposiciones colectivas entre las que cabe destacar ‘Territorios urbanos’, ’25 años de arte en Canarias’, ‘Los límites del suelo’, ‘Espacios íntimos’ y ‘Convergencias estacionales, arquitecturas emocionales’.