Pedro San Ginés, presidente del Cabildo de Lanzarote, se ha sentido directamente afectado por la columna «Mariate Pinocho» que Francisco Pomares publicó en El Día y ha escrito una respuesta que reproducimos seguidamente.
No ha sido la primera vez que se demuestra la falta de veracidad en los contenidos y afirmaciones que Pomares rubrica en torno al 33 FIMC, como fue el artículo «Desmontando a Francisco Pomares» publicado en este mismo medio.
Esta es otra prueba más.
«Mucho se ha hablado y escrito sobre la 33 edición del Festival Internacional de Música de Canarias (FIMC), especialmente por quienes desde el minuto menos uno negaron la más mínima oportunidad al replanteamiento que del mismo se hizo por la nueva dirección artística y política, tratando de acercarlo al gran público sin renunciar a los melómanos de siempre, al tiempo de hacer más partícipes a los músicos canarios sin renunciar tampoco a bandas de renombre. Otra cosa es en qué grado esto se ha conseguido.
Cierto es que todo es mejorable y que habrá muchas cosas que afinar y ajustar para alcanzar ese propósito, y también que sin duda se habrán cometido errores, como muchos errores se cometieron en el pasado cuando el Festival llegó a gastar cifras verdaderamente astronómicas con escasa, cuando no nula, petición de rendición de cuentas por quienes ahora se rasgan las vestiduras exigiéndolas al día siguiente de finalizar el Festival.
Pero de ahí a lo que, a mi modo de ver, se convirtió desde un principio en una operación de acoso, derribo y boicot, promovida, probablemente y entre otros, por quienes se sintieron desposeídos de la batuta en la toma de decisiones, y por supuesto por las élites que hasta entonces se reservaban su disfrute casi en exclusiva, va un trecho muy grande.
Especialmente cuando solo para tener razón y atacar a la dirección política se falta directamente a la verdad como hizo Francisco Pomares en el artículo titulado ‘Pinocho Mariate’, publicado el pasado 11 de febrero en el periódico El Día, cuando asegura en relación al FIMC que ha habido ‘compra camuflada de entradas con dinero de organismos dependientes del Cabildo de Lanzarote’, prácticamente acusando a esta Institución de delinquir.
Si una de las máximas del periodismo debe ser contrastar la información de lo que se publica, en esta ocasión se ha faltado flagrantemente a esa máxima porque me consta que el señor Pomares no ha contrastado absolutamente nada, y que si lo hubiese hecho habría comprobado que eso que le deben de haber contado no tiene nada que ver con la verdad, pues ni el Cabildo de Lanzarote ni ninguno de sus organismos dependientes ha gastado un solo céntimo en la compra de entradas, como falsa y alegremente acusa el Sr. Pomares en su artículo.
No voy a entrar ahora en el resto de lo mucho y negativo que se dice en ese y otros artículos del mismo autor sobre la 33 edición del Festival, pero espero que no tengan el mismo grado de contraste y veracidad que en lo concerniente al Cabildo de Lanzarote, que ha sido simplemente inexistente.»
Pues me temo que lo de la veracidad y el contraste se lo saltan sin contemplaciones…