Las personas interesadas en el trabajo que el creador Manuel Díaz Medina exhibe en la Casa-Museo Antonio Padrón, gestionada en Gáldar por el Cabildo de Gran Canaria, podrán hacerlo hasta el próximo 1 de septiembre, fecha de la clausura de la exposición ‘Gubia, maza y formón II: Homenaje a Antonio Padrón’.
3.000 personas han visitado hasta la fecha la singular exposición, que se exhibe en el espacio El Voladizo del mencionado museo. La muestra reúne numerosas piezas de diferentes tamaños realizadas en madera y que reproducen algunos de los motivos más significativos y emblemáticos de la obra del artista indigenista Antonio Padrón. El Voladizo de la Casa Museo Antonio Padrón de Gáldar puede visitarse de martes a domingo, de 10.00 a 18.00 horas.
Inspirándose en la rica iconografía del pintor de Gáldar, el maestro tallista, que comenzó a trabajar como aprendiz de carpintero en 1967, ha generado una obra de delicadas figuras que, tras ser sometidas a un laborioso proceso de desbaste y pulido, se muestran al público con todo su modesto esplendor, llenas de los matices que proporcionan las maderas de Díaz Medina.
Las tallas de Manuel Díaz modifican sus posiciones con respecto a los originales de Padrón, pero sin perder el ritmo de las curvaturas en tensión o su estilo avanzado. Su elección reproductiva contempla animales, como abubillas o camellos estilizados al modo padroniano, que el tallista realiza con una madera cuya veta vista funciona como un atractivo añadido a la ingenua visión del imaginario padroniano.
Tras iniciarse en el taller de Paco y Paulino, el artista perfeccionó el oficio con otros maestros: Carlos Medina, Francisco Osorio, Damián… Actualmente, realiza trabajos por encargo que van desde retablos a objetos vinculados a la agricultura, pasando por bustos, objetos decorativos o reproducciones de motivos típicos canarios.
“Hemos de agradecer que las tallas de Manuel Díaz ensanchen la órbita expansiva que la obra de Padrón sigue proyectando en quienes, más allá de contemplarlas, las escuchan y responden a su incitación estética con inspirada libertad estilística”, señala el ensayista y poeta Ángel Sánchez al referirse al trabajo del tallista Díaz Medina.
