jg chirino 26-10-2012

El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Santa Cruz de Tenerife obliga a pagar las costas del juicio por el litigio que en su momento interpuso, en nombre de Martín Chirino, la Asociación Visual Entidad de Gestión de Artistas Plásticos (Vegap) al considerar probado que el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, presidido entonces por Miguel Zerolo, atentó contra el derecho del autor y la integridad de su obra al mutilar y no rehabilitar la escultura El sueño de los continentes instalada en la Plaza de Europa. Por el contrario la sentencia no reclama indemnización alguna ya que resulta difícil establecer el valor real de la obra y por no existir un baremo objetivo de aplicación en estos casos. La Sala estimó que el problema no era tanto la mutilación de la pieza, justificada por motivos de seguridad, si no por el hecho probado de que no se repusiera el daño a su debido tiempo.

Los representantes del artista han declarado que no van a recurrir la sentencia ya que Martín Chirino nunca persiguió el dinero si no que se reparara el daño a su imagen. Hay que tener en consideración que al trocear la pieza y retirarla habían dejado casi solo el pedestal y tan siquiera pusieron un aviso de tal extremo, por lo que cualquier transeunte podría creerse que la obra del artista era tal y como la veía, con el consiguiente perjuicio para la carrera del artista.

Antecedentes

El día 3 de febrero de 2009 el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife procede a la retirada de parte de la obra El sueño de los continentes del artista canario Martín Chirino, ubicada en la Plaza de Europa. La obra llevaba vallada varios meses por el riesgo a que por la falta de mantenimiento de la escultura y por los fuertes vientos de esos días pudiera producirse un accidente. Ante la proximidad de los Carnavales que se celebraban en las inmediaciones y el fuerte temporal que azotaba Tenerife se tomó la decisión de su despiece y retirada definitiva.

Esta mutilación de la obra motivó la indignación del artista que, a través de sus representantes, solicitó la reparación de la misma. Según el artista “antiguos responsables de la Corporación local llegaron a decirme: Esa escultura es nuestra, no suya, y usted ya no tiene nada que ver con ella”.  Para el artista grancanario quedaba así de manifiesto que no existía el más mínimo compromiso por parte de la administración de preservar el legado artístico que se ponía en sus manos.

Abandonado el camino del diálogo es cuando la Vegap presenta una demanda que fue admitida a trámite mediante decreto del 28 de octubre de 2010 y notificado a las partes el 22 de noviembre del mismo año. En el texto se expone varias veces que el Ayuntamiento “no ha mostrado en ningún momento voluntad de reparar en la medida de lo posible el daño causado al señor Chirino” solicitando 540.000 euros en base al valor de obras semejantes realizadas por el autor y que justificaron presentando las pertinentes facturas.

Casi un año después, el 10 de septiembre de 2012, se inician las obras de restauración por el nuevo ejecutivo -realizadas gracias, en buena parte, al mecenazgo de CajaCanarias- y el alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, junto con el primer teniente de alcalde, Julio Pérez, el concejal Obras y Servicios Públicos, Dámaso Arteaga y la concejal de Cultura, Clara Segura, se interesan por la evolución de las mismas en consejo al día siguiente.

Fue el 26 de octubre de 2012 cuando Martín Chirino se reencontró con su obra ya restaurada e instalada en el emplazamiento original, momento que aparece en la foto de este artículo.  “A menudo se piensa que un daño moral puede repararse con dinero -manifestó el artista poco antes de reencontrarse con El sueño de los continentes-, y eso es un grave error”.

Tres meses después el Juzgado dicta sentencia teniendo en cuenta y valorando el hecho de que la obra ya había sido restaurada.