Estefanía Perdomo es Profesora Superior de Canto por el Conservatorio Superior de Música de Canarias donde se graduó con Matrícula de Honor y donde obtuvo los Premios de Fin de Carrera del Grado Medio y Grado Superior. Es además licenciada en Historia por la Universidad de Las Palmas.
Posteriormente realizó estudios de postgraduado en el Koninklijk Conservatorium en La Haya (Países Bajos) y más tarde inició sus estudios de máster en la Dutch National Opera Academy obteniendo las más altas calificaciones y una distinción a su profesionalidad e integridad artística.
Su carrera la comparte entre su amor por la música antigua y la ópera. Fundadora del Caldara Ensemble, grupo que interpreta música de compositores que trabajaron en la corte vienesa en el S.XVIII, colabora también con el ensemble Le Tendre Amour, centrado en la interpretación de música antigua judía en lengua hebrea, y con el ensemble Las Esferas, con los que trabaja en la difusión del repertorio barroco español en los Países Bajos.
Dotada de un gran instrumento de amplia tesitura y bellísimo color, Estefanía demuestra que el dominio técnico no ha de estar reñido con el sentimiento y con ello logra secuestrar al público desde las primeras notas en sus interpretaciones. Esta capacidad, sumada a su rigor y seriedad profesional, ha catapultado a nuestra joven soprano a otros importantes escenarios fuera de nuestras fronteras en los que está obteniendo notables y merecidos éxitos.
– ¿Cómo inició su formación y cómo arrancó su carrera?
«Inicié mis estudios en el conservatorio de Las Palmas de Gran Canaria, cuando llegó el momento me matriculé en Historia en la ULPGC … y en tercero de carrera me di cuenta de que quería dedicarme a la música. Orienté todos mis esfuerzos desde entonces a hacerlo: estudios en el extranjero, cursos, audiciones, concursos, etc. Y poco a poco, empezaron a salir conciertos, se interesó por mí un agente, llegaron los buenos contratos.
Con el tiempo descubres que el único éxito al que aspiras realmente es al de ganarte dignamente la vida haciendo aquello que amas. Lo otro…es fama. Y eso no se sabe cuánto dura».
– ¿Por qué La Haya para estudiar?
«La necesidad de salir fuera a ampliar estudios era real: aquí en Canarias no eres nadie si no te vas fuera. Allí tenía además a mi pareja de entonces, un sistema educativo eficiente y barato, y una profesora norteamericana que en una clase de prueba me abrió los ojos a muchas cosas… Por otro lado en La Haya había una importante tradición de Música Antigua, algo que siempre me atrajo. Así que maté unos cuantos pájaros de un tiro».
– Ya tiene una extensa carrera profesional pero… ¿Qué recuerda con más cariño?
«La verdad es que soy muy afortunada, y he tenido la suerte de trabajar en muchos y muy variados proyectos. Recuerdo especialmente la producción de Parsifal del Gran Teatro del Liceo en 2011. La situación personal no era buena, y mis compañeros y la música de Wagner me sacaron del pozo».
– ¿En qué proyecto trabaja ahora?
«Ahora mismo estoy preparando mi próximo concierto en La Haya en septiembre, con una obra que estrené en el año 2009, ‘Mare Liberum’, y su posterior grabación. Me hace mucha ilusión porque cuando tienes la oportunidad de grabar una obra que has estrenado tu nombre va ligado ya por siempre a la música».
– ¿Qué piensa afrontar próximamente? ¿Cuál es su gran sueño?
«Mis proyectos futuros van orientados a proyectos más personales, centrados en la música de cámara, porque la coyuntura actual no permite ser ambicioso en cuanto al formato. ¿Mi sueño? Sigue siendo trabajar».
– ¿Cómo le afectan los recortes y la situación actual?
«Dramáticamente. Como a todos. Hay mucho menos trabajo y se paga peor. Incluso los grandes están reduciendo cachés. Y lo que también está sucediendo es que esta crisis está destapando problemas estructurales del sector de la cultura en nuestro país. Esperemos que sirva para algo».
– ¿Qué opinión le merecen las políticas culturales en Canarias?
«Sólo indicar que trabajo en Cultura y vivo en Canarias y las desconozco. Por algo será».
– ¿Cuál considera que es el trato que tiene la música clásica en las aulas?
«En las aulas la Música es una “María”, no se le da ninguna importancia. Incluso sé por algunos compañeros que otros profesores de los centros en los que trabajan los infravaloran. Cierto es que el curriculum es extenso y que es muy difícil de abordar. En el contexto de la reforma educativa y los recortes creo que la situación no va a mejorar».
– ¿Y por parte de la administración canaria?
«Con respecto a la administración canaria creo que la música clásica ha interesado mientras ha habido dinero: han sido financiadores, pero no han hecho ningún trabajo de gestión. Se han potenciado sólo unos sectores “privilegiados” y se ha dejado poco margen presupuestario a una casi inexistente gama media.
– ¿Y por el público canario?
«El público canario es algo conservador, pero existe un consumidor canario de música clásica en dos vertientes: el que gasta dinero en la gran figura internacional que acude al Festival; y el que acude exclusivamente a los pequeños conciertos gratuitos (consume, pero no paga por ello)».
– ¿Cuáles son los principales cambios actuales en su sector?
«La falta de presupuestos está cambiando muy lentamente el sector de la música clásica: creo que el poco dinero que hay se invierte mejor, y en cierto sentido se han dejado de cometer excesos del pasado. El problema sigue siendo que el dinero está mal repartido y que no existe una tradición de la Gestión Cultural en España. Porque hacer Gestión Cultural no es gastar el dinero de la subvención».
– ¿Cuál es su relación con Internet y las Nuevas Tecnologías?
«La verdad es que creo que las Nuevas Tecnologías están teniendo un impacto importante sobre todo en el ámbito de la difusión musical y del marketing. Ahora mismo gestiono mi página web, tengo un perfil profesional en Facebook y una cuenta en Twitter en donde comparto mis conocimientos sobre Historia de la Música, llegando a escribir incluso artículos en blogs especializados. Internet es lo que nos acerca al público y nos hace más humanos, más accesibles, y por ello, más interesantes».
– ¿Se puede vivir en Canarias dedicándose a su trabajo?
«Se puede si trabajas fuera. Ahora mismo trabajo mucho más en Península y el extranjero que aquí. Es difícil ser canario y trabajar en Canarias».
– ¿Qué anécdota destacaría de su carrera hasta hoy?
«Recuerdo volar a Tokio desde Viena para una tourneé con Don Giovanni y coincidir en el avión con Anna Netrebko… Yo la miré sorprendida y ella me dijo: “¿Sabes que podrías pasar por mi hermana?”. No lo olvidaré en la vida».
– ¿Qué consejos le daría a una persona que se inicia en su especialidad hoy?
«Que se arme de paciencia…y que no deje nunca de creer en lo que hace».
– En la actualidad se está debatiendo la cuestión de que en la mayoría de los casos los músicos no trabajan legalmente porque ni se pueden permitir ser autónomos con cuotas tan altas ni los empresarios los contratan legalmente… ¿Está pasando igual en los circuitos de la música clásica? ¿Cuál es su opinión al respecto?
«En la gama media, en donde yo me muevo, la cosa se está normalizando, pero sí que los contratos han sido a veces irregulares. Yo no puedo permitir ser autónoma en estos momentos de crisis, me compensa más tener un seguro médico privado y un plan de pensiones. Por otro lado, la Seguridad Social en España no tiene muchas opciones a la hora de darte de alta de manera puntual. Falta diversidad».
– ¿Cómo funciona legalmente entonces?
«Soy trabajadora de Régimen Especial de Artistas y Taurinos».
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