La exposición retrospectiva dedicada a César Manrique que se muestra actualmente en el Centro de Arte La Regenta entra en su última semana de exhibición al tener programada su clausura para el sábado 11 de enero. La muestra, que ha llegado al citado centro de la mano de Fundación CajaCanarias y el Gobierno autónomo, ha despertado un gran interés entre el público, con más de 8.000 visitantes, así como entre los escolares y participantes en las diferentes rutas guiadas organizadas por el centro.

‘César Manrique. La conciencia del paisaje’ es el título de la esta gran que reúne el mayor número de obras que, hasta la fecha, se han expuesto de César Manrique, con un discurso expositivo que incide en la preocupación del artista por Lanzarote, por Canarias y por cambiar nuestra percepción del paisaje.

Manrique en La Regenta

Una gran retrospectiva que retoma la voz de un artista con una gran conciencia pública recuperando, no sólo la obra de Manrique, sino también su actitud, su activismo volcado en la defensa del paisaje y la arquitectura vernácula y en la creación de espacios culturales. En su conjunto, la muestra aborda un análisis que aún no se había hecho, aportando esta idea de arte total que César Manrique, a su vuelta de Nueva York, intentó poner en práctica en su isla de Lanzarote, desde el compromiso del arte y la estética.

Su legado prismático y su posición de preeminencia en el arte y en la cultura canaria del siglo XX como un referente simbólico, quedan de manifiesto en el recorrido expositivo de un creador que entendía la pintura como acción.

Manrique y el Arte total

La muestra está integrada por 83 Obras -pinturas y esculturas-, así como por diversos documentos, bocetos, fotografías e instalaciones que recrean el lenguaje plástico de César Manrique (1919-1992). Los fondos artísticos proceden mayoritariamente de la Fundación César Manrique, así como de otras instituciones y colecciones particulares, y representan una amplia selección de la producción artística de César Manrique -básicamente de carácter pictórico-, desde sus inicios, en la década de 1940, hasta sus últimos años, a principios de la década de 1990.

A partir de este proyecto de carácter retrospectivo se analizan las distintas manifestaciones artísticas de Manrique en su faceta como pintor, escultor, arquitecto, ecologista, conservador de monumentos, consejero de construcción, planeador de complejos urbanísticos y configurador de paisajes y jardines. Asimismo, la muestra pone de manifiesto la relación existente entre su obra y la defensa de los valores medioambientales de Canarias, así como la armonía que Manrique siempre mantuvo entre el arte y la naturaleza como espacio creativo.

Itinerario de la exposición

La exposición está integrada por secciones. Se inicia en los primeros años de César Manrique en su isla natal, la impronta de la cultura popular en su pensamiento y obra, o la intensa relación existente entre su obra y el paisaje volcánico de Lanzarote. Asimismo, se repasan sus etapas en Madrid y Nueva York, sus influencias artísticas, sus inquietudes como creador y la propia consolidación de su lenguaje artístico, en el que aflora su apego al paisaje insular, a partir de una estética abstracta, con la que recrea el dramatismo del paisaje insular, rico en texturas geológicas y colores. Continúa con un repaso sobre la impronta de la arquitectura popular en el pensamiento y obra de Manrique, su preocupación por la preservación del patrimonio arquitectónico popular, así como la faceta artística de César Manrique sobre el territorio, en los procesos de construcción de los Centros de Arte, Cultura y Turismo (CACT) y en sus proyectos territoriales y, por último, su faceta activista, su compromiso con el territorio y con el desarrollo sostenible.