El lunes, 7 de abril (20.00 horas), la Casa de Colón se suma a los actos conmemorativos impulsados en España con motivo del IV Centenario de la muerte de El Greco, con la celebración de la conferencia ‘El Greco, todos los caminos conducen a Toledo’, que será impartida por la catedrática de Historia del Arte de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) María de los Reyes Hernández Socorro.

Conferencia sobre El Greco en la Casa de Colón

En su conferencia, que tendrá lugar el mismo día en que se cumplen 400 años de la muerte de este artista referente de la Historia del Arte, acaecida el 7 de abril de 1614, Hernández abordará los aspectos característicos que definen la pintura y el pensamiento estético del pintor español de origen griego Doménikos Theotokópoulos, que vivió 37 años de su vida en la ciudad de Toledo.

Al ser preguntada por lo que suponen para el espectador las siempre reconocibles pinturas religiosas del Greco, la catedrática de Historia del Arte opina que, sin duda, «el privilegio de poder asimilar la enigmática y manierista expresividad  humanista que atesoran, aspectos que conmovieron a los contemporáneos de su círculo y que hoy en día continúan convenciendo por la fuerza de su oratoria plástica».

María de los Reyes Hernández justificará en su conferencia «la indiscutible personalidad de sus imágenes sacras, la humanidad y sentimientos contenidos que despliegan, ha sido lo que ha permitido que siglo tras siglo su obra haya podido dialogar, reiteradamente, con distintas generaciones de espectadores de todo el mundo».

Según la catedrática, «el pensamiento estético de Doménikos Theotokópoulos refleja y transmite en sus producciones, de modo didáctico y escenográfico, el espíritu de su época. Queda patente en sus visiones cristológicas, marianas y hagiográficas, así como en los cuidados y convincentes retratos y en su  renovadora  visión del  paisaje toledano».

Para Hernández, «ello fue posible, no sólo por la habilidad de la destreza pictórica de El Greco, sino gracias a ese privilegiado círculo de personajes vinculados al mundo eclesiástico que le protegió por haber sabido asimilar y entender el mensaje de renovación del arte sacro-acorde con los nuevos tiempos- que le demandaban. En consecuencia, devoción y acertada expresión artística se entremezclan y entretejen en el imaginario de este pintor, escultor y tracista cretense del que conmemoramos el cuatrocientos aniversario de su fallecimiento, adoptado como  pintor hispano por su asentamiento y vinculación con la castellana ciudad de Toledo».