Mi abuela siempre me enseñaba una hoja de papel, de aspecto antiguo, en el que su título decía: DESEO
Era un poema, un poema que llegue, desde muy niño a aprendérmelo de memoria.
Esa hoja de papel se la había dado su amiga, a la que llamaba «Charo» a la cual había hospedado en su casa de Tenerife, más concretamente en el Edificio El Carmen.
Al mudarse mis abuelos a Las Palmas (Gran Canaria), la señora Charo se vino con mi abuela y juntas consiguieron una casa en el barrio de la Isleta. Mis abuelos se instalaron en una gran casa a la orilla de la playa de Las Canteras, justo donde nací yo.
Las visitas de Charo eran habituales en la casa de mis abuelos.
Mi abuela me contó que esa hoja con el poema «Deseo» la había encontrado entre las pertenencias de su querida amiga.
Según mi abuela todo esto ocurrió sobre finales de los ’70 y ’80.
Una vez me dijo: – Mi amiga es una gran artista y familiar de Federico García Lorca. Es conocida en toda España como «Charito de Granada», su nombre real era Rosario Lozano García.
Cuando se mudaron a la isla de Gran Canaria, Charito de Granada dejó algunas de sus pertenencias en casa de mis abuelos.
Algunos documentos que me han seguido durante toda mi vida. Muchos poemas, cartas de historias del cautiverio en las cárceles de la Guerra Civil.
Nunca he visto esos poemas en los libros de Federico García Lorca, pero si me han inspirado mucho. Una anécdota terrible me contó mi abuela, las lagrimas y los gritos de Charito de Granada cuando vio a su madre subiendo a un camión para ser ejecutada. Su madre se llamaba Enriqueta García de la Plata.
DESEO, mi poema favorito. Lo tuve que recitar por ser el poema que tanto me ha inspirado.
¡Va por ti poeta!
Gracias por tu inspiración.
https://www.youtube.com/watch?v=eLkyLnc30sw
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