COMIDA-DE-COLORESCarnaval es sinónimo de color. El comedor del CEIP Antonio del Valle Menéndez también ha querido celebrarlo y ha dedicado la tercera edición de su Semana Gastronómica a ‘La comida de colores’. Durante esta semana, los alumnos han podido disfrutar de un menú colorido. Así, cada día de la semana ha tenido un color diferente en la comida que se ha servido en el comedor escolar.

El lunes fue el día para el naranja por lo que se disfrutó de una crema de zanahoria, de pollo en salsa de tomate y mostaza y de postre una naranja. Hoy viernes, los pequeños disfrutarán de un menú multicolor para despedir la semana. “El sentido de la vista influye mucho a la hora de comer”, explica el cocinero del CEIP Antonio del Valle Menéndez, Francisco del Valle.

Asimismo, los alumnos han recibido en clase una explicación previa sobre el efecto visual que causa la comida sobre el ser humano. “En nuestros primeros años nos acostumbran a comer papillas, potajes… todos ellos de color crema. Cuando el niño pasa a una alimentación más variada que contiene otros colores, la rechaza porque su vista y, a su vez su cerebro, no asocian los diferentes colores a la comida”, comenta del Valle.

Ciertos colores en la comida causan desprecio en las personas. Este desprecio es debido a que el cerebro no relaciona esos colores con los alimentos. No obstante, es “una conducta social que se puede cambiar”, añade el cocinero. De otro modo, hay colores en la comida que atraen la atención de la persona o el niño ya que, culturalmente, se ha acostumbrado a esa relación cromático-gastronómica.

Modificar conductas a la hora de comer

Esta tercera edición, ‘La comida de colores’, tiene como principal objetivo modificar esas conductas mencionadas anteriormente. “Lo más importante es la variación del color que traerá un modificación en la conducta de los niños a la hora de comer. Se podrá pasar del rechazo a la aceptación si acostumbramos a la variedad de colores en los primeros años de vida de los niños”, asegura Francisco del Valle quien hace especial mención a las verduras, muchas de ellas de color verde. El cocinero pensó que el color verde, el martes pasado, sería rechazado por la mayoría de los comensales del CEIP pero tuvo éxito.

El gorro del cocinero y la decoración del comedor se han ido cambiando según el color asignado para ese día. “Los niños entienden que todo debe ir en sintonía”, comenta. Además, se han añadido paneles informativos sobre el color de ese día que contienen información sobre el efecto que tienen en las personas esos colores. Todo íntimamente ligado al sentido de la vista y el gusto. El chef del Valle agradece encarecidamente la libertad que la dirección del CEIP Antonio del Valle Menéndez ha dado para realizar esta semana gastronómica dedicada a los colores. Por su parte, Olga Díaz Herrero, directora del CEIP, comenta que “es una iniciativa genial para ampliar el repertorio de menús en los comedores escolares. Los niños saber comer de todo”.

La intención de esta semana gastronómica es seguir con su prolongación en el tiempo. Es su tercera edición y se pretende continuar con diferentes temáticas para cada año. No existe una semana gastronómica de este tipo en algún otro centro educativo de la zona.