TEA Tenerife Espacio de las Artes proyecta este fin de semana la película muda Nosferatu, de Friedrich Wilhelm Murnau. La cinta se podrá ver desde hoy, viernes 26, hasta el domingo, dia 28, en dos pases diarios, que comienzan a las 19,00 y 21,30 horas. La exhibición de este largometraje se muestra bajo la denominación Creative Commons y Dominio público, ciclo al que el centro de arte contemporáneo del Cabildo dedica un fin de semana con entrada gratuita previa retirada de las invitaciones en taquilla.
Creative Commons y Dominio público permite a TEA Tenerife Espacio de las Artes mostrar trabajos audiovisuales -largometrajes, documentales y cor-tometrajes de cine independiente o películas clásicas- que se encuentren bajo este tipo de licencias de propiedad intelec-tual conocidas como Creative Commons, o cuyos derechos de comunicación pública sean de dominio público por haber expirado, por cuestiones legales o porque sus autores así lo han querido.
Murnau sitúa este largometraje en 1838. En la ciudad de Wisborg viven felices el joven Hutter y su mujer Ellen, hasta que el oscuro agente inmobiliario Knock decide enviar a Hutter a Transilvania para cerrar un negocio con el conde Orlok. Se trata de la venta de una finca de Wisborg, que linda con la casa de Hutter. Durante el largo viaje, Hutter pernocta en una posada, donde ojea un viejo tratado sobre vampiros que encuentra en su habitación. Una vez en el castillo, es recibido por el siniestro conde. Al día siguiente, Hutter amanece con dos pequeñas marcas en el cuello, que interpreta como picaduras de mosquito. Una vez firmado el contrato, descubre que el conde es, en realidad, un vampiro. Al verle partir hacia su nuevo hogar, Hutter teme por Ellen.
Esta película alemana, rodada en 1922 y de 96 minutos de duración, está interpretada en los principales papeles por Max Schreck, Alexander Granach, Gustav von Wangenheim, Greta Schröeder, GH Schnell, Ruth Landshoff, John Gottowt y Gustav Botz.
El director Murnau -cuyo verdadero nombre era Friedrich Wilhelm Plumpe- estudió Literatura e Historia del Arte en la Universidad de Heidelberg antes de instruirse en teatro y cinematografía junto a Max Reinhardt. Con Der Knabe In Blau (1919) debutó como director, y con Nosferatu (1922), adaptación del Drácula de Bram Stoker, el realizador germano alcanzó prestigio como cineasta en todo el mundo, reafirmando su autoridad como uno de los directores más influyentes de todos los tiempos gracias a una tríada de obras maestras iniciada con Nosferatu (1922) y continuada con El Último (1924) y Fausto (1926).
En 1926 aceptó una oferta de la Fox para trabajar en Hollywood. Amanecer (1927), otra de sus películas imperecederas, fue su primer título en tierras americanas y aclamada como una obra maestra. Posteriormente rodó, con menos éxito, Los cuatro diablos (1928) y El pan nuestro de cada día (1930). Junto a Robert Flaherty filmó el conocido título ambientado en la Polinesia, Tabú (1931), su última película, ya que ese mismo año, con 42 años, falleció a causa de un accidente de coche en California.
