Felipe Hodgson ha simultaneado su carrera como arquitecto con una intensa dedicación a la pintura, la escultura, el grabado y la docencia, realizando mas de cuarenta exposiciones individuales en Canarias, Madrid y Roma. Su nueva producción, reunida bajo el título ‘Desde el dibujo hasta la pintura’, se podrá visitar a partir del próximo viernes 17 de julio, y hasta 12 de septiembre, en la sala de arte Cabrera Pinto de La Laguna.
Para Felipe Hodgson existe la creencia general de que el pintor ejecuta las ideas que quiere representar directamente sobre el lienzo. Se estima que el dibujo se aparta de la pintura cuando la técnica de representación que se genera mediante el trazo o el boceto preparatorio se acaba en ese primer estadio del conocimiento. «Las ocurrencias que iluminan nuestra imaginación, que las tenemos en nuestra mente, se pueden proyectar mediante unas líneas que nos darán la creatividad de algún detalle. En esta muestra, trato de proyectar mediante brainstorming las descargas de la mente sobre el papel, las representaciones mentales de algo, sin juzgar, sin evaluar lo garabateado, siendo estas libres hasta cuando empieza la parte racional y complicada que es llevar al lienzo la primera chispa, la más fresca, fácil y sencilla», argumenta el pintor.
El dibujo y la pintura irán por distintos caminos y pueden entrar en antagonismos siempre que se considere que el dibujo puede ser el arte de la representación de objetos o ideas que no se pueden explicar mediante la palabra, o la escritura, o que es también un instrumento en los procesos de cualquier diseño apartado completamente de la pintura. Sin embargo, si se usan las líneas o rayas marcadas sobre el papel como una indagación de las exploraciones mentales para seguir el camino hasta la pintura, es cuando pueden ir hermanadas las dos representaciones. Las manchas que generan los pigmentos, aplastados sobre una tela por pinceles o por otros medios, pueden incrementar el conocimiento de lo representado desde el dibujo. «Trato de descubrir las analogías existentes entre técnicas tan heterogéneas en apariencia como son el dibujo y la pintura, mostrándolas en esta exposición» explica.
Felipe Hodgson, en sus anteriores series, a menudo satura de color la superficie de los cuadros, pero en otros momentos la elude, dando lugar, en ambos casos, a formas pictóricas instintivas. El artista, en el marco del expresionismo gestual, esparce el color sobre la tela, en una acción que nace tanto del azar como de la intuición cromática.. Este uso instintivo de distintos elementos y técnicas pictóricas produce paisajes y territorios unas veces idílicos y otras violentos, que, continuamente, muestran la relación particular del autor con el paisaje y con la pintura de paisajes.
