El pasado fin de semana (2 y 3 marzo), el cuarteto de cuerda holandés Wolność deleitó a los públicos de Lanzarote y Fuerteventura con un magnífico concierto. La interpretación fue al tiempo apasionada y rigurosa, con fuerza y sensibilidad. En definitiva: magnífico.

Class_ik iniciaba así su nueva temporada con un programa cuidado y bien elegido por Nino Díaz, programador del Ciclo, que estaba conformado por tres obras completamente distintas.

El concierto se abrió con el Cuarteto de Cuerda nº 12 en Fa Mayor “Americano” Op. 96 del compositor checo Antonín Dvořák. Uno de los cuartetos más bellos de la historia de la música, y que su autor compuso en América en un tiempo record, poco después de escribir la también bellísima “Sinfonía del Nuevo mundo”. Quería escribir algo melodioso y simple, y para ello siempre tuvo en su cabeza a su admirado Haydn. Los críticos estadounidenses lo prodigaron con grandes elogios como “¿Por qué Dvořák no había venido antes por aquí?”

El programa continuó con el Cuarteto de Cuerda nº 1 del propio Nino Díaz, que nos ofreció un magistral paseo, en apenas diez minutos, por diferentes escenarios melódicos, rítmicos y tímbricos. Una obra ecléctica (como muchas otras del autor) compuesta en Barcelona en 1996, y en la que ya se puede intuir al Nino Díaz actual.

La tercera pieza que Wolność nos ofreció fue el Cuarteto nº 4 de Silvestre Revueltas. Una obra compuesta en 1932, pero de una modernidad rítmica, armónica y melódica aplastantes. Resumiendo: Una obra realmente impresionante. Silvestre Revueltas es el más influyente compositor mexicano, por el alcance y originalidad de su música de cámara y de ciertas obras orquestales. La música de Revueltas ha despertado un gran interés musicológico internacional, situándolo entre los creadores más originales de la música del siglo XX.

Para mayor deleite del público asistente, cada obra fue introducida de forma didáctica y muy amena por el primer violín, el mexicano-ruso Alfredo Reyes Logounova.

El conjunto instrumental mostró sobradamente y en todo momento su destreza y cualidades sobresalientes, con un acertado equilibrio entre precisión y espontaneidad, notable interacción y potencial «solo» de todos los músicos.

Casi un centenar de personas en el Teatro Municipal de Tías arroparon al Cuarteto de Cuerda con total entrega, que fue correspondida, al finalizar el programa, obsequiando a los asistentes con un bis de la obra de Alberto Iglesias “Me voy a morir de tanto amor”, de la película “Lucía y el sexo”.

Con igual deleite y entusiasmo asistió el público en el Auditorio Insular de Fuerteventura que, pese a la escasa asistencia, se entregó totalmente y disfrutó muchísimo del programa y de la magistral interpretación del Cuarteto.