Una isla a la deriva es una novela de ficción que se desarrolla en El Hierro durante el verano de 2011. Cuenta la historia de cuatro personajes: John Sabach, un ladrón de guante blanco; Sandra Alba, una guapa vulcanóloga; Luke Parker, un agente del Centro de Investigación de Delitos Monetarios de Nueva York y Tizol, un peligroso asesino a sueldo. Todos se encuentran en la isla cuando comienzan a producirse una serie de terremotos que anteceden a una catástrofe natural de proporciones inesperadas.

Se trata de la primera novela del escritor canario Jorge Fonte que durante los últimos veinte años se ha dedicado profesionalmente al ensayo cinematográfico, por lo que su estilo literario es eminentemente visual y rico en descripciones directas que facilitan enormemente la lectura de la obra. De ahí que uno de los atractivos de esta novela, cuya trama no decae en ningún momento y atrapa la atención del lector desde la primera página, además de su trepidante ritmo sea, precisamente, que está escrita con un lenguaje sencillo y ligero por un hombre que conoce bien la isla ya que, pese a haber nacido en Tenerife, siempre se ha sentido como un herreño de adopción.