La artista tinerfeña Miriam Durango lleva su última producción visual al Centro de Arte y Exposiciones de Fuenlabrada, Madrid, desde mañana jueves, 17 de octubre, y hasta el próximo 5 de noviembre. ‘Efímero’ es el título de esta muestra que incluye videoinstalación y composición fotográfica digital. La exposición de Durango en Madrid cuenta con el apoyo de Canarias Crea, el programa del Gobierno Autónomo para favorecer la movilidad cultural hacia el exterior de las Islas.

Miriam Durango_Verano en Lituania

 

 

‘Efímero’

«Ya para Einstein el tiempo era un fenómeno ilusorio. Pero, ¿existimos nosotros? ¿Seres temporales en un universo no temporal?». A partir de este planteamiento, Miriam Durango invita a la reflexión sobre el humano como el único organismo que conscientemente se afana más allá de las necesidades que le imprime su propia especie, «creyendo con esto ignorar nuestras propias fronteras sin querer reconocer lo efímero de la existencia»

Durango concluye que a la velocidad con la que nos asomamos «a esa ventana llamada mundo que nos rodea», apenas somos conscientes de lo que sucede a nuestro alrededor y sólo nos percatamos de la manera limitada de nuestros sentidos físicos, «cuando la tecnología atrapa un instante congelando del tiempo en una secuencia única».

Así, a través de sus composiciones fotográficas digitales ‘La colina de las cruces’ y ‘Verano en Lituania’, ambas de 2012, invita a la exploración de estos espacios para entender su íntima realidad. Con la cámara de vídeo como herramienta inicial y mediante un proceso de construcción basado en secuencias temporales, cada fotograma es la huella de un instante. El tiempo salta imperceptiblemente de un fotograma a otro para quedar engarzado, congelado en la imagen definitivamente atrapada, «vestigio de lo que fue, eterna».

Las instalaciones de vídeo ‘Migraciones’, ‘Hundimiento’ y ‘Patinaje y desaparición’, realizadas entre 2004 y 2006, aunque grabados del natural, se transforman en animaciones en las que los personajes son mostrados como abstracciones confinadas en un espacio ilimitado, un no espacio, «la humanidad empequeñecida por el (no) paisaje». Realidad dudosa, actividad circular, identidades transitorias. Los protagonistas ya no están sujetos a la gravedad y su acción intenta desprenderse de los confines de la pantalla. «Sin pasado ni futuro, rechazan la historia. La metáfora como realidad insustancial de la tragedia cotidiana», describe la artista.

Con la más larga de las obras videográficas, ‘Ojo’, de trece minutos y realizada en 2005, Durango representa una presencia suspendida por encima de una inmensidad, «como horrible volcán en erupción, majestad divina, como si el vacío mismo en medio del que se encuentra me exigiera ser yo, para otro, asumiendo los preparativos de una ejecución final».

Miriam Durango, nacida en Tenerife, se formó en Madrid y Barcelona y ha mostrado su obra en varios países. Es una artista de amplia trayectoria que ha compaginado la creación con el comisariado y la gestión cultural. Como comisaria independiente ha realizado numerosas actividades y en la actualidad es presidenta del Círculo de Bellas Artes de Tenerife.

De un trabajo inicial realizado con pintura ha ido pasando a una exploración de las nuevas formas expresivas que se manifiestan mediante las nuevas tecnologías, el vídeo, el arte sonoro, las instalaciones y el arte electrónico. Rastreadora, lectora de mapas y observadora errante, en una época en que los espacios virtuales sustituyen a los reales, su mirada se desplaza sin cesar, oscilando y buscando un punto de apoyo, atrapada en la insistencia por construir/deconstruir.