Esta mañana oí una abubilla cantar. La bella ave estaba posada encima de un mato de malgusto picoteando chuchangos pegados a su tronco seco. El malgusto es un arbusto de aspecto desmadejado, hojas de un verde desvaído y flores amarillas que por Lanzarote llaman tabobo o árbol bobo y otros llaman, más apropiadamente, tabaco moro; porque no es otra cosa que un pariente menor del tabaco, la Nicotiana glauca de los botánicos, que procede de la Argentina.
Cuando miré con atención al apupú, como la llamábamos en mi infancia, el ave enderezó su cresta, retiró su pico curvo de la rama y produjo un sonido agudo que sirvió de aviso a otro ejemplar que saltaba un poco más allá, sobre unos verodes resecos, dando buena cuenta de otra colonia de caracoles pegados al tronco. Como quiera que cometí la imprudencia de acercarme, las dos aves saltaron y emprendieron, al unísono, un vuelo rápido hasta las fincas del barranco, alejándose de mí.
Las abubillas emitieron un canto repetido, que sonaba: ”up-up-up”, onomatopeya que les da su nombre científico, Upupa epops. Durante unos instantes las seguí con la mirada, pensando en la belleza de aquellas vistosas aves y me intrigó la pregunta de cómo se llamaría el nombre de ese canto: ¿upupar? ¿upupear? ¿apupear? Abubilla
Ninguna de esas palabras están en el RAE, en el Diccionario del Uso del Español de María Moliner. Así que me puse a darle a las teclas y me di un “garbeo” novelero por este “internete” nuestro buscando respuestas.
Por ninguna parte las encontré. Durante el almuerzo le pregunté a mi octogenaria madre, como último recurso de sabiduría popular, en vano: Nadie parece saber cómo se llama el canto de la abubilla.
Un poco más tarde indagué de nuevo por la red de redes hasta toparme con un curioso artículo en el periódico digital de ABC
Allí hacían repaso a las voces de los animales, citando -a su vez- dos blogs: uno llamado “Estilo”, de la Fundación para el Español Urgente (Fundéu) ESTILO y otro, Blog de Lengua Española, de Alberto Bustos, profesor de Didáctica de la Lengua y la Literatura en la Universidad de Extremadura. ALBERTO BUSTOS
En ambos blogs tendrá ocasión el lector oportunidad de repasar cómo se llaman las voces de algunos animales, unos muy conocidos y otros menos. Podrá recordar que las golondrinas trisan, las cigüeñas crotoran, los loros garran y la perdiz ajea.
Mientras eso ocurre, yo sigo buscando el nombre de la voz de la abubilla. Y ya puestos, también el de la gaviota argéntea (Larus cachinnans) y el del vencejo unicolor (Apus unicolor), que surca el cielo de Canarias en este verano macaronésico, ¿“trisando”? entre los celajes del alisio. Si alguien conoce sus nombres, les agradecería cualquier información.
Foto destacada de Javier Vega Canariensis2: http://www.flickr.com/photos/xavifluchos/6476033073/sizes/l/in/photostream/
ABUBILLA
Pájaro muy venerado en Egipto, representado muchas veces en el remate del cetro de Horus. Es símbolo de alegria y amor filial. Entre los griegos se le conocía por el nombre de ison y entre los caldeos por el de boíl
Ricardo,
Muchas gracias por la información, que no conocía. Tomo buena nota.
Un abrazo
Abubilla, bella ave, que me también he tenido la curiosidad de averiguar el nombre del canto, pero no encuentro nada, pero me acordé que cuando tienes un limón no se debe pensar en lo agrio que es sino en el zumo que puedes sacar, por ello, me quedo con su imagen posada en el malgusto picoteando chuchangos en el tronco seco, con el doble valor de que lo haga en libertad.
He fotografiado la abubilla esta mañana en el barrio de buenavista escaleritas en las palmas de gran canaria.