“Es fundamental dar estabilidad y, para ello, MiradasDoc necesita superar la incertidumbre”, aseguró en el auditorio de Guía de Isora Pedro Martín, alcalde de este municipio del sur de Tenerife (Islas Canarias), que es sede de este festival internacional de cine documental. Martín se refirió así a las dificultades financieras que ha encontrado este certamen cinematográfico para garantizar su continuidad en los últimos años, durante el acto de inauguración de la octava edición del festival.

Comienzan las proyecciones en MiradasDoc 2013

MiradasDoc 2013

En este sentido, el consejero de Cultura y Patrimonio del Cabildo de Tenerife, Cristóbal de la Rosa, que participó también en la sesión inaugural, confirmó el apoyo del Gobierno insular a este programa cultural porque “la cultura aporta a la sociedad valores sociales y económicos, además de los estrictamente artísticos”. Este es el motivo por el que De la Rosa considera “fundamental” continuar con el apoyo público a estas iniciativas y es lo que explica el respaldo del Cabildo de Tenerife “desde siempre” a MiradasDoc.

El festival comenzó su andadura este año con la proyección de la película Con la pata quebrada, de Diego Galán, en la que, señala el director, “hemos intentado ver cómo ha visto el cine español a la mujer desde los años treinta hasta casi nuestros días en un montaje dinámico, y confiamos que también divertido, aunque no por ello deje de ser interesante”. Galán se disculpó por no poder estar presente en la proyección, pero envió al público un saludo grabado.

Pedro Martín destacó que MiradasDoc es uno de los pocos festivales de cine documental de altísima calidad que continúan activos en el país y, además, conserva “un mercado global de películas documentales que es un referente internacional”. Por esto, “es esencial garantizar que tendrá continuidad esta apuesta cultural que, además, vincula a Europa, América Latina y África desde el espacio natural para ello: las Islas Canarias”.

Alejandro Krawietz, director de MiradasDoc

Alejandro Krawietz, Director de MiradasDoc

“MiradasDoc permanece porque tenía que ser así: porque esta mirada diferente sobre el mundo es necesaria”, aseguró Alejandro Krawietz, director del Festival. La continuidad de MiradasDoc hasta esta octava edición se da “por la misma razón que continúa la cultura y continúa la esperanza; continúa porque es lo normal, lo que debe ser: algo en el ser humano ama la verdad y el conocimiento”, dijo Krawietz, quien subrayó que “ese algo no puede ser reducido, ni embargado, ni recortado, sino que tiende a amplificarse y a fortalecerse ante la dificultad”.

“MiradasDoc no es ocio: es tiempo verdadero; no es entretenimiento, sino experiencia real”, añadió el director. Con este espíritu vuelve a Guía de Isora, como cada otoño desde hace ocho años, con una agenda completa de proyecciones durante nueve días en dos salas con programación simultánea. Las 48 películas de la sección oficial a concurso se exhibirán en dos ocasiones en horarios distintos, para facilitar el acceso del público. Además, el Festival ofrece una serie de muestras informativas: sobre el cine documental que se hace en estos momentos en Polonia y en Israel, además de las ya secciones habituales de Documental y Dependencia y Documental en Televisión, que este año recorre el trabajo que hace Salvados, el programa de La Sexta, reconocido por el público por sus contenidos y por su capacidad para renovar los códigos del lenguaje televisivo.

En su estructura general, el Festival mantiene los tres pilares que se definieron desde 2006: la exhibición de películas, las que participan en las distintas modalidades de concursos de la sección oficial y las de las muestras informativas; el mercado internacional de documentales ya realizados y de proyectos de películas en fase de producción (pitching) y la formación, concebida con varios fines: la formación de público joven –a través del programa EnseñanDoc-Con otros ojos–, y de público adulto –con el taller de Crítica–, y la formación de profesionales del documental –con los talleres DocExpress para estudiantes de los ciclos formativos de Imagen y Sonido, el programa CreaDoc, en colaboración con el Laboratorio de Escritura Audiovisual de Canarias (LEAC), y este año un taller de sonido–.

“A lo largo de estos años MiradasDoc ha conseguido que mirar y pensar sean conceptos solidarios: uno viene aquí, a estas pantallas, sin saber muy bien qué va a encontrar, pero con la certeza de que lo contemplado exigirá a su pensamiento, finalmente, vivir una aventura. Adentrarse en lo que no sabía, o en lo que no sabía que era así”, indicó el director del Festival al público presente en el auditorio de Guía de Isora.

El festival no lleva a su público “hacia un único lugar, sino que debemos decidir hacia dónde queremos ir y avanzar hacia allí con nuestros propios pasos”, dijo Krawietz. A pesar de las dificultades de organización debidas a las limitaciones financieras,  el equipo que hace posible MiradasDoc ha trabajado mucho para mantener la calidad de un festival que se caracteriza por su condición de “festival de frontera”, porque “vamos por delante, marcando la línea de por dónde irá el cine documental” en términos de creación y renovación del lenguaje del cine de realidad.