Este viernes, 29 de noviembre, a las 19.30 horas, Gran Canaria Espacio Digital pondrá punto y final al ciclo de cine alemán que, organizado por el Club de Cine ‘Cambio de Rollo’, ha venido celebrando desde  el pasado mes de octubre. El filme ‘Sturm’, dirigido en 2008 por Llans-Christian Schmidt, será la película que se exhiba (como es habitual, en versión original con subtítulos en español). La entrada será libre y gratuita (hasta completar aforo).

Fotograma_Sturm

El citado ciclo cinematográfico, que ha tenido lugar en el mencionado centro, adscrito a la Consejería de Presidencia, Cultura y Nuevas Tecnologías del Cabildo de Gran Canaria, ha contado con la colaboración del Consulado de Alemania en Las Palmas de Gran Canaria y del Instituto Goethe.

La película narra la historia de un general, criminal de guerra en la antigua Yugoslavia, que es juzgado por crímenes relacionados con la limpieza étnica por el Tribunal Penal Internacional de La Haya, y la carrera contrarreloj que debe emprender una fiscal (que interpreta Kerry Fox) para encontrar pruebas definitivas que incriminen al citado militar, acusado de haber deportado y provocado así la muerte de civiles musulmanes bosnios en Kasmaj, un pequeño pueblo de la actual República Serbia. El teutón Hans-Christian Schmidt opta por un enfoque realista, casi documental, sin excesos hollywoodienses, en este drama con pulso de thriller político en el que brilla sobre todo la actriz Ana María Marinca.

Tres años después de ‘El exorcismo de Micaela’ (Oso de Plata a la Mejor Actriz en el Festival de Berlín 2006), el director bávaro Hans-Christian Schmidt dirigió este filme sobre un tema que nunca antes se había abordado en el cine: la actividad del ICTY (el Tribunal Internacional para la ex Yugoslavia) de La Haya y las repercusiones de la política europea sobre las decisiones de este organismo.

Graduado en Dirección en el Hochschule für Fernsehen und Film de Mónaco y en Guión en la University of Southern California, en Los Ángeles, Schmidt nació en el 1956 en el seno de una familia liberal y ha trabajado como productor para su compañía 23/5 Filmproduktion desde 2004. Ecologista convencido, no era la primera vez que se ponía al frente de una película de gran compromiso socio-político. Ya en ‘Distant Lights’ (2003), había reconfigurado los confines de la «fortaleza europea» para relatar el malestar de la gente que, procedente de los países del Este, buscaba una vida mejor marcada por las dificultades y los fracasos en la Alemania unificada.

Schmidt introduce dentro de la sólida estructura tradicional del género de tribunales e intriga la contraposición entre una tragedia de la historia y las tragedias personales de algunos de sus protagonistas. Con el objeto de ofrecer una mayor libertad a los actores y de poner énfasis en los momentos más emocionantes de la historia, el director favoreció durante el rodaje el uso de la handycam, con muy buenos resultados en este filme rodado con un presupuesto de 6 millones de euros a caballo entre Sarajevo, Berlín, Colonia, los estudios de Trollhättan en Suecia y Holanda.