Gran recopilatorio de mentiras sobre 33 FIMC: Mentira nº 1

Mentira nº 1 sobre el Festival de Música de Canarias: La programación es mala, no tiene nivel

Desde que se presentó el 33 FIMC hasta hoy, una pequeña pero muy ruidosa troupe de periodistas y comunicadores, advirtiendo que hablaban en nombre de ‘los expertos’, han venido repitiendo machaconamente que la programación del Festival era de mala calidad, que no tenía nivel, que era floja, que no contaba ni con directores, ni con artistas que valieran la pena para un Festival de prestigio internacional como el nuestro.

En el colmo del ninguneo se hizo especial incidencia en nuestras orquestas, nuestras bandas, así como con los creadores y los músicos canarios en general asegurando que no tenían el nivel para el Festival de Música de Canarias.

Así tenemos que en un periquete se despacharon a gusto despreciando a los más de 600 músicos que han participado en esta edición y que, además, algunos ya habían participado en otras ediciones con el beneplácito de todo el mundo pero ahora, que los traía el nuevo coordinador, ya no servían. Su nivel y calidad se habían volatilizado.

Francisco Pomares, Alonso González Jerez, Carlos Sosa, Pepa Luzardo, Francisco Chavanel, Australia Navarro, Alberto García Saleh, Javier Moreno, Fernando Bethencourt, José Miguel Gonzalo Rodríguez, Antonio Castellano, Victoriano Suárez Álamo, Martín Alonso, José Agustín, Carlos Cruz, Antonio Rico, Agustín Pérez, Carlos Mesa, Alexis González, María José Suárez, Tere Morales, Carolina Prieto, Amaya Conde, Paula Nogales, Germán Paez, Sonia Rivero, Rayco Padilla, Leopoldo Pérez Díaz, Tomás Brito, Fernando López Vargas-Machuca, Manuel Mederos, Helmer Galvis, Rita Machín González, Jaime del Busto o Nueva Canarias han sido los que principalmente, y desde sus medios de comunicación y redes sociales, han dado pábulo a semejante mentira.

Los profesionales del sector nos hemos estado preguntando quiénes formaban ese grupo de expertos que asesoraban a todos estos para que pudieran decir tantas barbaridades. No podían ser doctores en musicología, ni graduados en musicología, ni personas que se dedicaran profesionalmente a la música. ¿No sería que estaríamos ante un caso más de comunicadores que mienten por fines espurios o políticos mientras que otras personas crédulas distribuyen la información sin contrastarla?

Un ejemplo de contradicción extrema

Es de reseñar el caso especial del ‘crítico’ Guillermo García-Alcalde, que publicó uno de los artículos más vejatorios, insultantes y despreciativos de toda la historia del Festival (que se recordará para la eternidad porque ya es patrimonio histórico del FIMC), titulado ‘Llanto y miserere por el Festival de Música de Canarias‘, en el que proponía «cancelar toda la programación» porque «se salvaría así del vergonzoso marrón de asesinar el Festival«.

No contento con semejante aseveración, se permitió arremeter salvajemente contra Nino Díaz, su consocio en Promuscan y uno de nuestros más internacionales músicos con un extenso currículo, con adjetivos tan poco afortunados como «adanista palurdo» o «indocumentado», y del que afirmaba que su «vuelo intelectual no levanta un palmo de la mediocridad de su propia carrera, insignificante y querenciosa en los últimos tiempos del recurso al enchufe, remunerado (a cambio de nada) por el presupuesto que todos nutrimos». Todo esto lo afirmaba todo un miembro de honor de Promuscan, asociación cuyo fin tiene por objeto el fomento y difusión de creaciones musicales de carácter culto realizadas por los compositores canarios o vinculados a Canarias, así como la recuperación y difusión del patrimonio musical generado en Canarias o relativo a Canarias. Un dislate de tal magnitud que le valió una propuesta de expediente disciplinario, que fue desestimada, pero que hizo cambiar de actitud al conocido melómano.

Tanto cambió su actitud, que pasó de pedir con insultos que se cancelara toda la programación a afirmar cosas como: «El programa de ahora, dedicado a dos monstruos sagrados del siglo XX, acredita la madurez de concepto», «Lo más aplaudido fue la obra del compositor canario Gustavo A. Trujillo», «un violinista con nombre propio en el estrellato internacional», «la tersa ejecución de los valiosos instrumentistas», «la gran orgía sonora», «hizo alarde de excelencia en el dominio técnico», «admirables instrumentistas», «las magníficas Labèque», «excelente idea», «lectura inteligente y sensible», «la gran pianista Rosa Torres Pardo propone con técnica poderosa», «el concierto fue una delicia», «ambos intérpretes mostraron su calidad de sonatistas con dos joyas», «el virtuosismo de los luminosos finales», «tocada a la perfección», «todos son instrumentistas de primera categoría, con elocuente trayectoria internacional» o «sus lecturas concilian el dominio virtuoso del texto con la vitalidad y la pasión creativa que catalizan la atención oyente y se adueñan del espacio acústico por la vía del placer»… Todas estas frases se encuentran documentadas en la relación de artículos que aparecen más abajo

¿En qué quedamos, Sr García-Alcalde?

Las pruebas de que han mentido

La verdad es que hasta la fecha se han publicado 68 artículos de opinión hablando de lo ocurrido en cada concierto bajo el punto de vista musical y en absolutamente ninguno se dice que las obras hayan sido malas o que los intérpretes no hayan tenido el nivel para nuestro Festival. Todo lo contrario. Las críticas y comentarios han sido excelentes, magníficas y de manera unánime.

¿Quienes mienten entonces? ¿Los musicólogos, los profesores superiores de música, los críticos especializados que han ido a los conciertos y han valorado el Festival como profesionales o los que desde hace seis meses, antes de haber sonado ni una sola corchea del Festival, han asegurado que no tenía nivel?

Está muy claro: Los profesionales que han acudido a los conciertos y que tienen el conocimiento y la preparación para valorar lo que realmente ha ocurrido.